Dibujar en un cartón dos círculos, uno de 8 cm y otro de 6 cm de diámetro. Poner cinta adhesiva por todo el dibujo.
Hacer bordes de cartón, forrar con cinta adhesiva.
Pegar los bordes con pegamento caliente. Repasar las juntas por fuera.
Llenar los moldes con la mezcla de cemento, que tiene que tener consistencia de un yogur. Controlar la altura, tienen que tener más o menos la misma altura.
Dar unos golpes en la mesa y dejar secarse 24 horas.
Sacar los detalles de los moldes y lijar los bordes con papel de lija.
Pegar los detalles entre si con pegamento "No más clavos" y dejar secarse.
Pintar con pintura blanca con dos o tres capas y dejar a secar.
Pincelar con barniz brillante. Dejar secarse.
Sacar del bastidor las partes metálicas y rellenar los agujeros con un poco de pegamento "No más clavos". Dejar secarse y repetir el proceso, hasta que los agujeros hayan desparecido.
Pintar el bastidor con la pintura de color blanco, dejar secarse y pintar una o dos veces más.
Pincelar con barniz brillante y dejar secarse.
Hacer de porcelana rusa los pajaritos, tantos como prefieras. Amasando la pasta bien y haciendo una bola lisa. De la bola hacer un óvalo e ir estirando los detalles con los dedos hasta que se parezca a un pajarito.
Dejar secarse 48 horas.
Si tienen algunos desperfectos, puedes hacer un poco de mezcla de cemento y rellenar con un pincel. Dejar secarse y luego lijar con papel de lija. Van a tener el cuerpo más liso.
Pintar los pajaritos con pintura blanca con dos o tres capas y dejar secarse.
Pincelar con barniz brillante. Dejar secarse.
Pegar el bastidor a la base más pequeña con pegamento instantáneo. Dejar apoyando un tiempo o aguantar con las manos, hasta que se aguante solo y se seque. Controlar que está derecho.
Poner los pajaritos, uno encima de la base y los otros cerca de él.